Ruta 40

Este juego está basado en conceptos de cinemática que se van planteando en la realización de una carrera de autos que transitan la famosa Ruta 40 de Argentina. Está compuesto por 4 tableros, que en términos de rally representan cuatro “primes”, con las distancias reales y localidades por las que va pasando la ruta. Cada casillero del tablero representa una distancia real de 20 km. Como en cualquier Rally, el objetivo del juego es completar los 4 Primes (tableros) en el menor tiempo posible. Cada turno de los jugadores significa una hora de tiempo real para los autos. Cada jugador posee un tablero individual donde lleva un control de su velocidad (un velocímetro) y dos casilleros, uno para indicar si el jugador está en situación de pérdida de turno y otro que indica si pasa a situación de “conductor prudente”. Para el movimiento de los autos se utilizan dos dados especiales: un dado que indica el valor absoluto de una variación de velocidad y el otro dado que indica el signo de la aceleración, pudiendo ser positiva (incremento de velocidad), negativa (disminución de la velocidad) y cero que implica que mantiene la velocidad con que venía el auto. Aparecen algunos conceptos muy importantes que descubre el alumno, como por ejemplo que un auto que tiene una velocidad de 60 km/h hacia adelante y en su turno al tirar el dado de aceleración le sale “negativa” y luego tira dado de variación de velocidad y obtiene 20 km/h significa que queda con velocidad de 40 km/h hacia adelante y sigue avanzando dos casilleros a pesar de tratarse de una aceleración negativa, una idea que el alumno generalmente asocia aceleración negativa con volver hacia atrás. En caso de seguir disminuyendo la velocidad y alcanzar valores negativos, el auto se moverá hacia atrás en el tablero siguiendo unas reglas especiales para esta situación previstas en el juego. El juego también contiene situaciones de clima, representadas por unas tarjetas y que definen las condiciones de clima para esa partida en particular. Esto hace que cada partida sea diferente. El juego respeta las normas viales del país, no se puede superar las velocidades máximas en ruta, por cuestiones de clima la velocidad máxima permitida disminuye, al llegar a localidades importantes hay límites de velocidad y radares que controlan la supuesta infracción y en estos casos, el jugador de turno puede optar por ser un “conductor prudente” y bajar la velocidad de manera manual o ser “imprudente” pero estar sometido al control del radar de la ciudad. También cada jugador cuenta con una serie de cartas de “ataque” y “defensa” que permiten a los jugadores aplicarlas sobre un competidor durante la partida generando algún tipo de inconveniente que podría ser evitado si el jugador atacado posee la carta de “defensa” que anula el ataque recibido. Estas situaciones forman parte del juego y le aportan variantes, pero que no tiene relación con la Física en sí misma. Siguiendo con estas variantes, el juego cuenta en su recorrido con unos casilleros especiales en los que se levanta una tarjeta de “incidentes” que representan situaciones favorables o desfavorables para el jugador de manera azarosa.